"Suena el despertador a las 7:00 am, es hora de levantarte y te cuesta un trabajo horrible salir de la cama, incluso los días que duermes un poco más."

"Termina la hora de comer, tienes que regresar a trabajar y tienes que lidiar con los bostezos, el cansancio y la falta de concentración."

"Llega la hora de hacer ejercicio, para ti es algo más que un simple reto. El solo hecho de ponerte la ropa de deporte te causa agotamiento."

Si te identificas con alguno de estos casos, es posible que sea porque la fatiga es uno de los síntomas principales del síndrome de ovario poliquístico.

Existen diversas causas que pueden estar relacionadas con la fatiga característica del SOP, algunas relacionadas con el desequilibrio de las hormonas en tu cuerpo y otras con deficiencias nutrimentales, algo también muy común en esta condición.

Las 4 posibles causas de tu fatiga:

1) Desequilibrio en los niveles de cortisol:

El cortisol es una hormona que libera nuestro cuerpo, principalmente en momentos de estrés, y tiene funciones indispensables.

Tener el balance adecuado de cortisol, es esencial para tu salud.

En momentos de estrés, esta hormona está encargada de preparar al cuerpo para huir o para enfrentarse a algún “depredador”.

El cortisol aumenta los niveles de glucosa en sangre, para tener energía disponible, además, disminuye funciones que no son indispensables en ese momento como las relacionadas con la digestión, fertilidad y sistema inmunológico.  

El cortisol funciona muy bien para un estado de emergencia. El problema es que cuando estás en un estado de estrés constante, una situación cada vez más común, tu cuerpo produce cortisol todo el tiempo.

La falta de sueño, una mala alimentación, el exceso de cafeína, problemas en casa o en el trabajo, estrés emocional o incluso el exceso de ejercicio mantienen a tu cuerpo en un estado constante de estés.

Después de semanas o meses de producir un exceso de cortisol, tus células se vuelven resistentes al mismo, lo que hace que tu sistema hormonal se desequilibre y el cortisol baje más de lo normal. Esta situación hará que te sientas agotada y con las pilas bajas todo el día.

 2) Altas y bajas de azúcar:

Del 70 al 80% de las mujeres con SOP, tienen resistencia a la insulina. Como te he contado en artículos anteriores, la insulina es la hormona que se encarga de introducir el azúcar a las células, disminuyendo así los niveles de azúcar en sangre.

Cuando tienes resistencia a la insulina, el cuerpo no logra introducir el azúcar de la sangre a las células de manera correcta, es por eso que aumenta la producción de insulina para lograr esta tarea.

Cuando comes alimentos ricos en azúcar o carbohidratos simples (sin fibra), tus niveles de azúcar se elevan demasiado, esto hace que tu cuerpo tenga que producir grandes cantidades de insulina para poder contrarrestar esta situación.

En ocasiones, este exceso de insulina hace que tus niveles de azúcar bajen más de lo normal, lo cual te hace sentir cansada, irritable e incluso mareada.

Estas altas y bajas en tus niveles de azúcar, causadas por el consumo excesivo de carbohidratos simples, pueden ser una de las razones de que te sientas tan cansada durante el día.

3) Deficiencia de vitaminas y minerales:

Las vitaminas y minerales son esenciales para mantener los niveles de energía de tu cuerpo.

Las mujeres con SOP, son más propensas a presentar deficiencias de estos nutrimentos.

Imagínate, por el simple hecho de tener SOP, eres 19 veces más propensa a tener deficiencia de magnesio, un mineral indispensable para la regulación del sueño. Sin un sueño de calidad, es normal que te sientas cansada durante el día.

Medicamentos como la Metformina, utilizada para mejorar la función de la insulina, pueden disminuir los niveles de vitaminas del complejo B, indispensables para que tu cuerpo genere energía.

La resistencia a la insulina, está muy relacionada con niveles bajos de vitamina D, y esta deficiencia se ha asociado con problemas inmunológicos, somnolencia durante el día y fatiga.

La deficiencia de hierro es una de las principales causas de cansancio en muchas mujeres, con y sin SOP. Te recomiendo revisar tus niveles de ferritina en sangre para comprobar si esta puede ser una de las causas de tu agotamiento y suplementar de forma adecuada.

4) Hipotiroidismo

Hasta el 25% de las mujeres con SOP tienen una función disminuida de la tiroides. Uno de los síntomas más comunes del hipotiroidismo es precisamente la fatiga. 

Si tienes SOP, es importante revisar tus hormonas tiroideas para descartar que puedan estar alteradas, empeorando los síntomas de esta condición.

Conclusión:

Lograr una rutina de sueño de calidad, controlar tus niveles de estrés, llevar una alimentación adecuada, tratar las deficiencias nutricionales y desequilibrios hormonales son la única forma de recuperar tu energía.

La fatiga en el SOP sí se puede revertir. Eres capaz de recuperar esa energía que tanto necesitas para hacer todas las cosas que son importantes para ti.

Recuerda que, como todo, esto no se resolverá de la noche a la mañana. Tu cuerpo necesita tiempo, cariño y paciencia para poner en orden todo aquello que lo lleva desequilibrando por tanto tiempo. 

Fuentes:

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