Todas las enfermedades comienzan en el intestino. (Hipócrates)

La salud de tu intestino está sumamente ligada a tus hormonas y puede ser la razón por la que tienes síntomas como cólicos, acné, dolores de cabeza, irritabilidad, fatiga o ganancia de peso.

La mayoría de las veces, la causa raíz de los desequilibrios hormonales del cuerpo empieza en el intestino.

El sistema digestivo es responsable de absorber los nutrimentos de los alimentos que consumes, que ayudan a tu cuerpo a producir las hormonas que necesitas y a eliminar las hormonas que no necesitas.

Si tienes síntomas como gases, inflamación, diarrea o estreñimiento, tu intestino necesita atención. 

Muchos de los síntomas de SOP están directamente relacionados con la salud de tu intestino, ya que el desequilibrio hormonal que se genera al no producir las hormonas necesarias o no eliminar el exceso de algunas hormonas es una de las causas principales de esta condición. 

En tu intestino viven miles de millones de microorganismos, más que células en tu cuerpo, que intervienen en tu peso, niveles de inflamación y tu salud hormonal en general.

El conjunto de microorganismos que viven en tu cuerpo se conoce como microbioma y se encuentran principalmente en tu intestino, aunque también están en tu nariz, garganta, piel y tracto vaginal.

El microbioma es responsable de gran parte de las funciones de tu cuerpo, incluyendo, además de la digestión y absorción de alimentos, la fución de tu sistema inmunológico.

Muchas veces, pensamos en las bacterias y demás microorganismos como algo malo, cuando la realidad es que son indispensables para nuestro cuerpo.

El problema se presenta cuando no tenemos suficientes bacterias buenas y existe un exceso de bacterias dañinas.

En general, las mujeres con SOP, tienen una mayor cantidad de bacterias dañinas y menos bacterias benéficas, esto se conoce como disbiosis y se relaciona con muchos de los síntomas de esta condición. 

Existen factores que pueden alterar el equilibrio normal de tu microbioma (el balance entre las bacterias buenas y malas), causando disbiosis.

La forma en la que naciste, afecta la calidad de tu microbioma. Cuando naces por parto natural, recibes el microbioma de tu madre, cuando naces por cesárea, no obtienes todas esas bacterias. Las personas que nacen por cesárea suelen tener mayores desequilibrios a nivel del microbioma.

Al igual que las cesáreas, la falta de lactancia materna afecta la calidad de las bacterias de tu cuerpo.

Estas son situaciones, que por obvias razones, ya no se pueden cambiar, pero es importante tenerlas en cuenta para entender tu salud intestinal y la calidad de tu microbioma.

El uso de antibióticos, pastillas anticonceptivas y otros medicamentos, también son causa de disbiosis. Este tipo de medicamentos disminuyen las bacterias buenas del intestino, más aún cuando se toman por largos periodos de tiempo.

Por cada tratamiento de antibióticos, tu microbioma tarda en reestablecer su equilibiro normal, un año aproximadamente.

Los antibióticos son medicamentos que han salvado muchas vidas desde hace décadas, pero también es verdad que su uso indiscriminado se relaciona con disbiosis y, por lo tanto, problemas hormonales y metabólicos.

Los anticonceptivos, son una de las terapias más utilizadas para las mujeres con SOP, pero hay que tomar en cuenta que además de afectar a las bacterias buenas del intestino, estos medicamentos aumentan la resistencia a la insulina y la inflamación.

El desequilibrio de las bacterias en el intestino, está también relacionado con situaciones de inflamación y resistencia a la insulina, que aumentan los niveles de andrógenos y se relacionan con los síntomas principales de SOP como acné, hirsutismo (exceso de vello facial y corporal) y pérdida de cabello. Además de relacionarse con la falta de ovulación o irregularidad menstrual y el desarrollo de quistes en ovarios.

A su vez, el exceso de insulina, que aumenta los niveles de andrógenos y la inflamación afecta la flora normal del intestino. 

Esto se vuelve un círculo vicioso en el que el desorden en las hormonas afecta la salud del microbioma y la disbiosis empeora la cuestión hormonal.

Recuperar el equilibrio de las bacterias del intestino, debe ser una de las prioridades en el tratamiento de SOP, ya que sin un microbioma sano tu cuerpo no será capaz de absorber todos los nutrimentos que necesita para sintetizar de forma adecuada las hormonas, ni será capaz de desechar el exceso de hormonas junto con otras toxinas que emperoran los síntomas de SOP.

Evitar situaciones que agredan al intestino como el consumo de medicamentos innecesarios, alimentos procesados o alimentos que provoquen algún tipo de alergia o sensibilidad es el primer paso para recuperar la salud intestinal.

Consumir suficientes verduras y frutas, junto con alimentos fermentados y probióticos ayudará a tu microbioma a repoblarse con bacterias benéficas y recobrar poco a poco su equilibrio.

Fuentes:

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