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Cuando los cólicos menstruales no son normales: ¿cómo se relacionan con SOP?

cólicos inflamación menstruación periodo sop Dec 16, 2019

Quiero empezar este artículo diciendo que tener periodos sumamente abundantes y dolorosos es algo común pero no es algo normal.  El hecho de que muchas mujeres tengan este problema, no quiere decir que deba ser así. 

Los cólicos menstruales son un síntoma que está sumamente normalizado, son tantas las mujeres que los presentan que ya se ve como algo cotidiano que está ahí como parte de nuestro ciclo.

El dolor menstrual es el único dolor que reconocemos como algo normal, cualquier otro tipo de dolor se considera un signo de alarma. 

Recuerda que como hablamos en el artículo acerca de la importancia de tu ciclo menstrual, tu periodo es una reflejo de tu salud hormonal y de tu salud en general, por lo que debes poner atención.

 

¿Cómo se relacionan los cólicos menstruales con SOP?

Puede que tengas SOP y cólicos menstruales al mismo tiempo, pero estas dos condiciones no están relacionadas.

El dolor menstrual puede estar relacionado con algunos tipos de quistes en los ovarios, pero no se relaciona con el tipo de quistes característicos de SOP, que en realidad son folículos no desarrollados.

 

¿Qué pasa en tu cuerpo durante la menstruación?

El sangrado durante tu menstruación se asocia con inflamación y daño de tejido (algo totalmente normal en este proceso), la inflamación es parte del proceso normal de curación.

La menstruación es un proceso inflamatorio natural como también lo es la ovulación.

Para que ocurra la menstruación nuestro cuerpo produce unas sustancias llamadas prostaglandinas que se relacionan con contracciones musculares y ayudan a eliminar el revestimiento del útero.

Las mujeres que tienen dolor menstrual suelen tener niveles de prostaglandinas tres o cuatro veces más elevados que las mujeres que no presentan dolor.

Las prostaglandinas son un marcador de inflamación, tener un exceso de prostaglandinas contribuye a tener mayores contracciones y más dolor.

Es importante entender el proceso natural de tu menstruación para identificar qué puede ir mal o qué parte no funciona de manera óptima.

 

¿Cómo se ve un periodo saludable? 

Un periodo saludable empieza con un sangrado moderado a abundante que dura entre tres y siete días.

La mayor parte de la sangre de la menstruación, se pierde durante los dos a tres primeros días de tu periodo. Después, el sangrado empieza a disminuir.

En un ciclo menstrual saludable pierdes entre 30 y 80 ml de sangre.

Para que te des una idea:

  • Una toalla sanitaria absorbe entre 5 y 15 ml de sangre
  • Un tampón absorbe 5 ml de sangre
  • Una copa menstrual absorbe entre 15 y 30 ml de sangre, dependiendo de la talla

Hay mujeres que tienen periodos más ligeros y otros más abundantes, el útero de cada mujer es diferente en tamaño, por lo que la intensidad de los periodos también es diferente.

Si se presenta algo de dolor, suele ser en el primer y segundo día de la menstruación.

En un periodo normal y saludable, debes esperar tener molestias mínimas o ninguna molestia. No significa que no sientas nada, pero no tendría por qué ser doloroso o necesitar medicamentos.

 

¿Qué es “normal” dentro del dolor menstrual?

En este caso pongo normal entre comillas porque ningún dolor debería considerarse normal, recuerda que tu periodo debe presentarse prácticamente sin molestias. 

El dolor menstrual que se considera normal, se conoce también como dismenorrea primaria y se siente como ligeros calambres en la parte baja de la pelvis o en la espalda.

Ocurre durante el primer o segundo día del periodo y mejora con el ibuprofeno. No interfiere con tus actividades diarias.

Este tipo de dolor es causado por la liberación excesiva de prostaglandinas (las sustancias inflamatorias de las que hablamos) en el útero y mejora con la edad.

Ojo, sobrevivir tus periodos a base de Ibuprofeno u otros antiinflamatorios no es saludable. Tu cuerpo te está enviando señales de que hay algo que no funciona como debería y es hora de poner atención.

Con esto no te quiero decir que dejes de tomar medicamentos que te quitan el dolor y te ayudan a llevar un poco mejor tu día, pero si que mientras manejas el dolor del momento, debes trabajar también en identificar la verdadera causa de estas molestias y ver cómo puedes abordarla.

 

Estrategias para disminuir el dolor menstrual 

El problema de muchos de los tratamientos para el dolor menstrual es que se enfocan en desaparecer el dolor y no en llegar al fondo del problema.

Por supuesto, es totalmente válido utilizar tratamientos que te ayuden a disminuir el dolor y a sentirte lo mejor que puedas durante estos días, pero es importante que al mismo tiempo te enfoques en llegar a la raíz del problema para que lo puedas resolver.

Recuperarte de cualquier situación relacionada con el dolor menstrual nunca es algo rápido, es un proceso que lleva tiempo, pero una vez que vas en el camino correcto, todo empieza a funcionar mejor.

 

1) Evitar los lácteos

La primera estrategia es retirar la leche de vaca y derivados de tu dieta. No estoy en contra de los lácteos como regla general, pero para mujeres con dolor menstrual  puede que los lácteos sean un problema, debido al contenido de caseína A1 que se relaciona con problemas de inflamación y del sistema inmunológico. 

Te recomiendo evitar los lácteos por un periodo mínimo de tres mes y observar si hay algún cambio en tus síntomas. Para muchas mujeres evitar los lácteos de vaca puede ser suficiente para mejorar sus problemas con el periodo.

Evitar también otros alimentos inflamatorios como azúcar, harinas refinadas y aceites vegetales puede hacer una diferencia importante en el dolor menstrual.

 

 

2) Revisar tu exposición a toxinas ambientales

Revisar tu exposición a toxinas ambientales puede hacer una diferencia en tus síntomas menstruales. 

Es importante evitar el contacto con toxinas ambientales, especialmente xenoestrógenos que pueden estar en maquillajes, aromatizantes, detergentes, shampoos, cremas, etc.

 

3) Tomar magnesio

Para muchas mujeres tomar magnesio puede ayudarlas a mejorar sus periodos, ya que es un potente antiinflamatorio.

El magnesio ayuda a prevenir y aliviar el dolor menstrual, ya que disminuye a las prostaglandinas que causan inflamación.

Otros suplementos antiinflamatorios como el Omega 3 también puede ayudar con el dolor menstrual.

 

4) Tomar zinc

Se ha visto que el zinc disminuye las prostaglandinas en mujeres con dolor menstrual y mejora la circulación en el útero, por lo que es una buena alternativa para aliviar los cólicos.

Es muy importante saber que los suplementos por si solos no van a resolver la situación, es importante ayudar a tu cuerpo a reducir la inflamación desde todos los frentes. 

Te recomiendo probar diferentes estrategias, ya que no a todas las mujeres les funciona lo mismo.

 

5) Hacer ejercicio

Estudios demuestran que realizar ejercicio de baja intensidad, como estiramientos o yoga, ayudan a disminuir el dolo menstrual.

De hecho, el ejercicio dio mejores resultados que la utilización de antiinflamatorios en un estudio.


 

¿Qué se considera un dolor menstrual severo?

Un dolor menstrual severo, también conocido como dismenorrea secundaria, es un dolor agudo, punzante y palpitante que dura varios días y puede ocurrir incluso fuera de tu periodo.

Este tipo de dolor no mejora con el Ibuprofeno y puede ser tan fuerte que te cause vómito y no te permita realizar las actividades de tu día.

 

¿Qué puede causar un dolor menstrual severo?

Este tipo de dolor se relaciona con condiciones médicas como endometriosis (presencia de tejido endometrial fuera del útero), adenomiosis (presencia de tejido endometrial en el miometrio), disfunción pélvica, fibromas o quistes en los ovarios.

 El dolor menstrual severo empeora con la edad.

 

¿Cuándo pedir ayuda?

Te recomiendo probar las estrategias que te comenté en la parte superior por un periodo de tres meses, si tu dolor menstrual no disminuye de forma considerable, pide ayuda a tu médico para descubrir cuál es la causa de este malestar, descartar o confirmar algún diagnóstico e implementar el tratamiento adecuado.  

Existen muchas causas de periodos abundantes y dolorosos, es por eso que no siempre es fácil identificar cuál es exactamente la tuya. Trabaja junto con tu médico para llegar al fondo del problema.

 

Conclusión

Aunque los cólicos menstruales son algo sumamente común en las mujeres, esto no quiere decir que sea normal.

Algunas personas ven el dolor menstrual como una parte de ser mujer. Pero el dolor severo que afecta tus actividades diarias, no es algo que tienes que soportar.

Llegar a la raíz de lo que está causando el dolor es indispensable para resolver la situación. Además, este dolor puede ser la clave para diagnosticar padecimientos que ponen en riesgo tu salud a largo plazo.

No te conformes con manejar el dolor cada mes, explora que lo ocasiona y haz todo lo que esté en tus manos para resolverlo, tu cuerpo se merece estar bien y tú eres la única responsable de lograrlo.

 

 

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